Justin Bieber, durante el 2011, ha dado un paso evidente: ha dejado de ser el pequeño cantante adolescente, para convertirse en un guapo hombre joven.
Este año Justin ha vivido un año muy intenso, lleno de trabajo y de proyectos, ha estado haciendo muchos viajes debido a sus giras, ha grabado muchas canciones y, por supuesto, ha mantenido su relación amorosa con Selena Gomez.
Durante el comienzo de año Justin era mucho más niño y se notaba en muchas cosas, por ejemplo en su comportamiento, que llegó a ser hasta molesto cuando hacía pesadas bromas, pero también en su aspecto físico: la cara de Justin ha dado el brinco para transformarse en un hombre joven (mucho más guapo, por cierto).
En su manera de peinarse ha dado recientemente un cambio enorme, ahora ya no parece un niño que está saliendo de la regadera y se pone una gorra. Este cambio le ha venido de maravilla, cada vez Justin se vuelve más atractivo.
No hay duda que su relación con Selena Gomez lo ha hecho madurar, solo hay que ver el novio tan correcto y complaciente que es, lo que no podría ser si no hubiera dado el paso a convertirse en un hombre.
La voz es otra prueba rotunda de que Justin Bieber ya dejó atrás su infancia y hasta su pubertad, junto con la voz se ha notado también el cambio en las canciones del cantante; en fin, todo demuestra que Justin ya entró a la recta que lo convertirá en un futuro no muy lejano en todo un hombre.
El futuro se ve muy bien para el nuevo Justin, ojalá que pueda lograr todas sus metas y que siga tan feliz con Selena Gomez.
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